
Las mencionadas prohibiciones y otros bandos municipales (Ordenanzas de Policía de la Villa) fueron debilitándose con el paso del tiempo. La población de la capital de España en 1787 era de 164.000 madrileños según el censo de Floridablanca.
De todos los barrios, el de Lavapiés, era el más poblado y con mayor industria. Conocemos el lugar que ocupó el Rastro del siglo XVII por la descripción del Plano de Teixeira. Se sabe que era zona de mataderos y en sus aledaños se realizaban tareas relacionadas con el curtido de las pieles de los animales sacrificados; actividades que han quedado reflejadas en el callejero madrileño: calles del Carnero, Cabestreros, Ribera de Curtidores (denominada por entonces calle de Tenerías) El nombre se origina porque al transportar arrastrando las reses, ya muertas y aún sin desollar, desde el matadero, cercano al río Manzanares, hasta las curtidurías, se dejaba un rastro de sangre aumentado por el desnivel de Ribera de Curtidores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario